Ir al contenido principal

Entradas

Mostrando las entradas etiquetadas como Pequeñas delicias de la vida en sociedad

Navidad en el 76

Por Matías Rótulo  S ube el que vende tarjetas navideñas. "Diez por diez", dice mostrando a un Papá Noel.  La señora se va al fondo con sus regalos, los aplasta al pasar junto a un gordo que ocupa el pasillo.  El guarda se pelea con una vieja, porque la vieja le dice, le reclama que es una vergüenza que hasta las 19 horas del 24, que sólo hasta esa hora, uno tenga ómnibus para viajar. Es el mismo 24 y son las 17 horas. Parece que la ciudad se conmociona. Los autos corretean. El ómnibus va lento, muy lento. La gente quiere llegar de una vez a sus hogares, pues es un día de encuentro, un día de felicidad, y de recogimiento. Un día de pensamiento. Sube un niño a cantar una canción. Una de esas dulces canciones de Navidad que cantada por un niño, es hermosa, pero por ese niño, paradójicamente a muchos le da lástima. El niño mientras canta mira para afuera. La canta entonando, pero como con un reflejo de la costumbre de salir a pedir dinero, o

Que le vaya mal al verdulero nuevo

En la esquina de mi casa hay una nueva frutería y verdulería. Hoy, de paso por la panadería, escuché la conversación entre dos personas: "vino para complicarle la vida a X". Resulta que el señor X tiene una verdulería y frutería callejera justo al lado de la panadería ubicada en U..., en un barrio popular de Montevideo.  Por Matías Rótulo Desde que vivo en el barrio, el señor X tiene su negocio con relativo buen éxito. Pero el demonio se instaló en la esquina. El nuevo verdulero no quiere trabajar y ganarse el pan dignamente, sino destruir los logros del más viejo. Eso es al menos lo que interpreté de la charla entre las vecinas. A eso se sumó otro vecino que le auguró al nuevo verdulero un mal destino.  Cual economista de televisión, o político televisado que sabe de economía lo mismo que yo de partículas de plomo, hizo un rápido cálculo sobre lo que el verdulero, instalado en un local bastante grande y que de a poco se va llenando de productos. Razonó que iba a

Murgas injustas, poco ecuánimes y subjetivas

Se acusa a las murgas uruguayas de no criticar al gobierno del Frente Amplio y de darle palo al futuro gobierno. El arte ¿Debería ser ecuánime, objetivo y justo? Por Matías Rótulo "Objetividad" grita para recalcar aquella señora cuando escucha a la murga Queso Magro .  "Ecuanimidad", dice el señor del otro lado, levantando el dedo acusador para señalar después a Agarrate Catalina.   "Sean más justos" reclama a Metele que son pasteles,   otra persona desde más lejos. Mientras tanto, un político se refiere en redes sociales a este tipo de murgas como "totalitarias", haciendo una afirmación totalizadora y condenando como un fiscal justo, ecuánime y objetivo el enojo que su subjetividad le dicta. Es que en este Carnaval, las murgas se vinieron con todo y a ninguna parece gustarle el gobierno que asumirá el 1° de marzo, fecha en la cual ellas, seguramente, seguirán haciendo tablados.  ¿Se imaginan un arte ecuánime, obetivo y jus

Muñecas rusas

¿Cómo hace una sociedad que condena ciertos aspectos de su sociedad, para esconder lo que su propia Cultura construyó con el correr de los siglos? ¿Cómo hará Rusia para condenar a sus propios héroes, a su propio pasado cultural y hasta político que toleró (no en todos los tiempos), la homosexualidad? Por Matías Rótulo “ Yo siempre supe como es el juego lucha en el barro con tus amigas” Indio Solari, “Black Russian” El gobierno ruso (con un alto apoyo de la sociedad de aquel país) enfrentó en 2016 una demanda internacional (que terminó en la nada, claro está), una demanda moral en el marco de las medidas que imponen la prohibición de imágenes o contenidos en medios de comunicación sobre relaciones  “no tradicionales”. Es decir, no se permitía emitir publicidad que promuevan las relaciones homosexuales. La medida restrictiva del gobierno  es para que niños y niñas no padezcan las consecuencias, tal como se explica desde Moscú. Para que tenga una idea, si esto fuera Rusia,

Acto de bondad

Hay personas que se sienten bien levantando perritos de la calle o atándose a un árbol para que no lo tiren o militando en un sindicato o rezando por el alma de alguuen. Sienten esa satisfacción de la bondad por el hecho realizado hacía un otro.  Yo, lo que hago, es darle la razón a la gente. Sí, ante una controversia que me involucra le doy la razón a las personas. No hay nada más satisfactorio que tener la razón, ser dueño de la verdad, el poseedor de la respuesta correcta. Pero no hay nada más hermoso que hacer feliz al prójimo al hacerle sentir ese nirvana por sabiduría. Yo sé que tengo razón, pero voy y le digo al otro "qué gran verdad". ¡Qué placer el ver la cara de goce de aquel que me enfrenta, ganándome la pequeña batalla de la mente! Pero yo me voy satisfecho, tras haber recuperado por un ratito, el espíritu de alguien.  ¿Ustedes qué piensan? Pueden darme felicidad o yo puedo hacerlos felices con un simple comentario.  MR

"Estoy en la mía" o "andá a cagar"

Reflexión sobre el individualismo en las relaciones humanas y las excusas dadas para terminar una pareja o no comenzar una relación. Varias veces en el último tiempo, escuché la frase "estoy en la mía", dicha en conversaciones ajenas, aunque también me la han dicho a mí.  Al trabajar con adolescentes y vincularme con adultos (ya casi no hay diferencias entre unos y otros) he registrado en varias oportunidades este slogan. Se aplica, en especial, en casos como este: Dos adolescentes hablando en la puerta de mi casa (vivo a cien metros de dos liceos). - Ella: Ya te dije, no voy a seguir con vos. - Él: Dale... ¿Pero por qué no? - Ella- Estoy re en la mía, con mis problemas en casa. ¡Qué dolor! Estar "en la mía" significa atender todos esos problemas ajenos al muchacho, pero no tener lugar para atender al muchacho. Usted podría decir "pero che, ¿No te das cuenta que lo quiere dejar?" Y yo a usted le respondería "¿No sería mejor que le diga qu

Los hombres altos

No sé ustedes, pero yo siempre me imaginé a los actores que interpretaban a los superhéroes como hombres altos, de estatura por encima de la media, despegados del piso. De hecho, Christopher Reeve, el Súperman que más admiro, medía 1,93. Guy Williams, el Zorro más legendario andaba por los 190 centímetros. Por Matías Rótulo ¿Se imaginan un Hércules por debajo de los 2 metros? Me molestó toda la vida, asociar a Robin como un Superhéroe, por el simple hecho de quedar unos centímetros por el camino con respecto al elevado Batman. Cuando veo a un hombre de gran estatura, me pregunto por qué no se dedicó a ser un héroe mitológico o uno con capa y espada. Hay una razón para todo esto, resulta que mis hermanos son más altos que yo, y yo soy el menor de los hermanos. Ojo, soy alto, pero no tan alto como Daniel Rotulo , el mayor y más alto de mis hermanos. De chico, él me parecía enorme. Lo veía tan alto... como si arañara las nubes. Cuando usaba barba y pelo largo, andaba como el Jesús de al

¿Llegamos a la mayoría de edad?

Voltaire  París, 21 de noviembre de 1694 – ibídem, 30 de mayo de 1778 Dependemos de horóscopos, profecías, curas, y rabinos. Dependemos de los informativos y de lo que le gusta a los demás. Porque lo que le gusta a los demás nos tiene que gustar a nosotros porque sino estamos afuera del mundo.  Algunos siglos antes, Voltaire, Kant y Diderot se enfrentaron a la religión organizada como único pensamiento imperante y sobre las verdades absolutas incomprobables.  Por Matías Rótulo K ant no responde a la pregunta “¿Qué es la ilustración?” Responde cómo la Ilustración puede influir en el pensamiento del hombre y sobre cuál es el fin de la Ilustración. Responde también sobre el ideal de la Ilustración, lo que puede significar “ser ilustrado”, y muestra el objetivo de los referentes de la ilustración para alcanzarl Si bien tendemos a determinar las épocas según títulos que sinteticen aquellas formas de pensamiento más representativa en el arte, las ciencias, la historia, la sociedad…

Primero el gol, después el dolor

Vaz Ferreira escribió Moral para intelectuales  una obra filosófica pero también una declaración de principios. Hoy, ya no hay ni moralidad ni intelectuales. Todo ha cambiado desde Vaz Ferreira y eso se vio el día que hubo un muerto en Salto.  Por Matías Rótulo Un típico inmoral telectual uruguayo es el hincha de fútbol. Su pasión va más allá de cualquier intento lógico por analizar algo lógicamente. Ojo, el inmoral telectual futbolero a veces es contradictorio. Intenta, mediante estadísticas científicas, descubrir si tal o cual equipo ganará el partido del domingo. Entonces, evalúa las estadísticas desde el año 1865 a la fecha. Después se llena la boca hablando de la pasión, la sin razón del sentimiento. Cuando alguien intenta analizar dicha pasión, es tratado como loco, como enfermo, como alguien falto de corazón.  Pero no es sobre la falsa ciencia utilizada para la falsa pasión que termina siendo un negocio real de lo que hablo. Me refiero a la no concientiz

Madres, padres, soldados e inocentes

El soldado miró a su víctima a los ojos, aunque la víctima, sin saber que lo iba a ser dentro de poco, los mantenía tranquilamente cerrados. Una mujer lloraba, allá en el rincón, apuntada con un hacha por el otro soldado. El esposo de la mujer seguía rogándole a otro soldado, afuera de la choza, que no cumpliera con la orden del rey. El soldado, uno de los más fieles al rey lo miró sin odio, pero fijamente. "Os voy a dejar entrar", le prometió, aunque no lo hizo. En el fondo de su alma, el soldado disfrutó del dolor del otro, de sus esperanzas, de su mentira. De la esperanza, ya no de la salvación, pero sí del estar de cuerpo presente, cuando el cuerpo sangre. El padre supo de la mentira, supo que el hijo del vientre de su esposa, la carne de su carne, era un inocente. Miró al cielo y pensó "eternamente seremos culpables". Afuera de la choza, otros gritos y murmullos se repetían. Entraba a aquella, la casita donde estaban los dos soldados, la madre y

Uruguayos excusan sexo con adolescentes

Un artículo que a ocho años de haber sido publicado, mantiene cierta vigencia. ¿Cuál es el comportamiento de los hombres uruguayos ante la explotación sexual de adolescentes? Por Matías Rótulo y Maritna Brandt  Una investigación realizada por la Red Uruguaya de Autonomías (RUDA) y UNICEF se centra en la masculinidad y su vínculo con la explotación sexual comercial infantil que se desarrolla en el área metropolitana de Montevideo. El trabajo gira el eje de prostituídos a prostituyentes y recae en las características de estos hombres y su tolerancia hacia el consumo de sexo pago con menores. Una investigación presentada ayer en el Ministerio de Turismo relevó que hoy en día el sexo comercial se ha integrado al paisaje socio-cultural y que ello se percibe tanto en las imágenes sexuales icónicas características de la publicidad como en los hábitos de hombres consumidores de sexo. La investigación hace hincapié en las características y prácticas de dichos consumidores, sobre todo